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sábado, 12 de diciembre de 2009

todo el cholerío paceño dueño de verdaderas fortunas tendría que ser investigado porque la riqueza está en sus manos previene Dante Pino

Ya se escuchan las primeras voces de los parlamentarios de PPB-CN inclinando la cabeza a la agenda propuesta por el MAS. Tal parece que se repetirán los pasos de PODEMOS. Se trata de ciertas leyes presentadas como íconos de la lucha contra la corrupción (investigación de fortunas) y otras que se colocan en el plano de la agenda nacional, anticipando que quien no esté con ellas, es que tiene algo que esconder, es que no está con el proceso de cambio o es un oligarca neoliberal vencido.

Y claro para no ser de “esos” hay que apoyar nomás todo lo que se venga. Investigar fortunas. ¿Y cuál es el objetivo? Quitarles a los que sean acusados de haber tenido “fortuna” todo el patrimonio que tengan. ¿Para qué? Eso ya es otro cantar. ¿Para qué se convierta en patrimonio del Estado?, ¿para que los inmaculados militantes del MAS se las repartan, como lo hacen con las incautaciones al narcotráfico?, o ¿para repartirla entre los pobres? Y a quien le importará el destino si todo lo que importa es el origen. Mal habido.

¿Cómo se establecerá ese origen? Digno de investigar. Pero la institución que se cree para ejecutar esta política, tendrá en sus manos el mejor instrumento, que la diabólica mentalidad de los que tienen ahora “todo el poder”, necesitan, para tener tranquilo, quieto o eliminado a todo opositor por barato que sea.

¿Cuáles son las fortunas en Bolivia? Pues aquellas que sean calificadas como tales. ¿Más de un millón de dólares, o la mitad?, ¿en bienes, dinero, acciones u otros valores? El inquisidor ¿tendrá toda la autoridad sobre el sistema financiero, Derechos Reales y cuanta puerta sea necesaria para establecer la fortuna y luego su origen? Vaya, por eso desde ahora se desafía a que se quite el secreto bancario como una muestra de que no hay nada que esconder.

En medio de la miseria de los sueldos que paga el Estado y el sector privado, el que alcanza a tener un millón de dólares tiene que estar sujeto a sospecha y ser investigado. Me imagino la cara de los comerciantes que viven en El Alto o los que comercian en la Uyustus o los que lo hacen en la calle Gallardo, los que tiene edificios en esas zonas que valen tres veces más que una casa en Calacoto. ¡Ale! Ahí están todos. Es cuestión de iniciar el juego y ver cómo uno tras otro van cayendo en las manos infernales de los todopoderosos.

La lección parece buscar no solo amedrentar sino establecer el principio de que toda riqueza es sospechosa y debe ser investigada. La norma se ha dicho será retroactiva y no es casual, pues en esa retroactividad reside la capacidad de destruir adversarios. Ya sé que me dirán que estoy tratando de proteger y apañar lo que hicieron los neoliberales y esa cantaleta la conozco de memoria. Precisamente ese es el pretexto. Los neoliberales y a partir de ellos contra todos. En este escenario no da sino pena escuchar las primeras declaraciones de diputadas y diputados de PPB-CN adelantándose a seguir el viejo juego de: síganme los buenos.

Sabemos que por su número no pueden evitar las tropelías que se avecinan, pero ¡por favor! Al menos tengan la decencia de pelear y de cumplir con el mandato que ese voto del NO a Evo y su manera de gobernar les ha enviado a la Asamblea. No pueden ser parte del uso aparentemente legal para evitar la corrupción que en realidad es un instrumento político para terminar con esos mismos diputados que ya se adelantan a ser buenos chicos.

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